Hace ya tres semanas que no sé de vos. Si estás bien, si estás mal, si no me querés ver más. En fin, de vos. Es un misterio para mí.
Te extraño y acá te espero, como lo hago cada vez que no hablamos, aunque esta vez es distinta y un poco peor.
¿Cómo andarás? ¿Dónde estarás? ¿Con quién estarás? (respuesta obvia) ¿Pensás en mi? Y si es así ¿Qué pensás?: Son cuestiones que frecuentan mi mente y mi cuerpo (de verdad, me enferman la cabeza) y que no permiten otra cosa más que tener ganas de verte.
¿No te cansa girar por mi cabeza todo el tiempo? Quiero decir, ¿No te marea?
Te extraño, no voy a cansarme de decirlo, pero ya me molesta el hecho de sentirlo.
Quiero verte, más que cualquier otra cosa. Quiero tus besos, tus brazos rodeando mi espalda, tus caricias, escuchar tu voz, tu sonrisa. Quiero estar con vos: te quiero.
Muchos usan la expresión “te quiero” para demostrar un cierto cariño, pero en este no es el caso, pues bien mi “te quiero” refiere a desear, necesitar, apetecer. Procurar, pretender. Por eso te repito: te quiero. Te quiero para mí.
No puedo no pensarte es que me hacés falta. Quiero ese abrazo hermoso que te doy cada vez que estamos acostados, que siguen de besos en tu cuello y en tus hombros.
Te quiero dar besos y abrazos. Y otra vez te quiero. Te quiero y mucho.
No sé que pensar. Si te fuiste no entiendo el por qué y si realmente lo hiciste espero que vuelvas. Es la primera vez que me pasa con vos. No me gustan las despedidas, quedate para mí, así no me tenés que volver a decir “Así te acordás de mí”. Te aseguro que no me voy a olvidar de vos ¿Por qué lo haría? Además ¿Por qué lo decís? ¿Tenés pensado irte? La respuesta es sí, tiene pensado irse. Sé que algún día se va a terminar, pero no quiero que sea así. Antes quiero hacerte y decirte todo lo que no pude hasta ahora. Todavía no, quedan cosas por hacer y rever. Como dice la canción: No, no te vayas, aún quedan palabras, mil frases del alma y entre ellas no estaba el adiós. Te debo un regalo ¿Te acordás? Te lo voy a dar… En algún momento te vas a ir, pero sé que todavía no es. Lo siento adentro, algo me dice “Todavía no”. Y bien, habrá que esperar…
No sé si es amor, pero te quiero. Te quiero en todos los sentidos, en todas las formas.
Quedate, no me dejes así, como todos.
Y sí, lo comprobé recién… Te amo y te quiero (más de lo que pensaba)
No hay comentarios:
Publicar un comentario